¿Por qué pelean los hermanos?
Las peleas entre hermanos no están restringidas únicamente a los hombrecitos o a un hijo único destronado. Las peleas entre hermanos las motiva la necesidad de exclusividad que tenemos todos sobre la atención y el amor de los padres. Cuando sospechamos de una preferencia con un hermano tendemos a pensar que no merecemos ese amor. El trabajo de los padres aquí se duplica al tener que dividir sus atenciones “de acuerdo a las necesidades de sus hijos”. No se trata de cómo usted proceda, si no de cómo ellos se sientan. Es una buena señal cuando los hijos, frente a una riña, recurren a su criterio para que de una solución al conflicto. Si usted se ha preparado lo suficiente o tiene dotes innatas de mediador podrá hacerlo exitosamente, de lo contrario agrandará las distancias entre ellos. Le perderán confianza y por resentimiento cometerán errores irreparables en sus vidas. Es una ardua tarea. Si usted ha tenido hermanos, entenderá la importancia. Conozca a sus hijos y sus particularidades. Escuche a todos los involucrados antes de dar su opinión. Asegúrese de haber puesto límites y reglas claras. Lea sobre cada tipo de personalidad. Obsérvelos y sepa qué prefiere cada uno. Ayúdelos a superar esos defectos con un plan de acción privado. Instrúyase en técnicas de resolución de conflictos. Consulte con un amigo o profesional. Cuéntele a sus hijos historias bien resueltas sobre sus hermanos. Dele un tiempo en exclusiva a cada uno. Pregúnteles a ellos las posibilidades de solución. Evite hacer favoritismos. Cuando vean una película, escuche sus opiniones. Sepa reparar o compensar si usted cometió un error. Mantenga la calma.
Clr. Adela Cueva Díaz
Counselor Sistémico
Orientadora Familiar
Conciliadora Extrajudicial
Mstr. Ciencias para La Familia